Cómo limpiar azulejos de la cocina: trucos y consejos
Si en su día no se hizo correctamente la instalación de la cerámica y no se usó la junta adecuada es probable que tu cocina se ensucie más de la cuenta y que la suciedad se perciba más a simple vista, pero ¿es posible dejar la cocina como nueva sin demasiado esfuerzo? Sí, sigue leyendo este post con todos los consejos y trucos para limpiar los azulejos de tu cocina y dejarlos como el primer día.
Métodos sencillos para limpiar los azulejos
Mantener la cocina como recién instalada solo es posible al 100% si hacemos una buena colocación de los azulejos y se usa un buen sellado de juntas, además de de realizar una buena limpieza diaria después de su uso, para evitar que se acumule la suciedad.
La cerámica y el porcelánico son materiales que están esmaltados y no tienen porosidad, lo que los convierte en un producto fantástico para su limpieza, ya que cualquier mancha es superficial. Solo con quita grasas convencional poco agresivo, o con una simple mezcla de agua y vinagre cualquier superficie de la cerámica queda completamente limpia.
Cómo limpiar azulejos con agua y vinagre
El vinagre es un potente limpiador y desinfectante. Para limpiar los azulejos de la suciedad más incrustada es posible que se requiera mezclar un poco de vinagre con agua o incluso con limpiador desengrasante. Se vierte agua y un buen chorro de vinagre blanco o vinagre de manzana en un recipiente, se mezcla bien, y con una esponja se limpian los azulejos. Cuando hay mucha grasa acumulada hay que frotar bien, el agua es mejor que esté tibia o caliente, ya que facilita la evaporación y no deja marca. Posteriormente se retiran todos los restos con un trapo limpio. El resultado son unos azulejos que brillan como recién instalados.
¿Se puede limpiar los azulejos de la cocina con bicarbonato?
El bicarbonato de sodio es una de las fórmulas más respetuosas con el medio ambiente para limpiar los azulejos de la cocina. Podríamos incluirlo como uno de los métodos de residuo cero para la cocina, es soluble en agua y posee propiedades desodorizantes y desincrustantes. Se puede utilizar para eliminar la grasa más dura de diferentes superficies, como la vitrocerámica, los azulejos (especialmente las juntas), el horno o el fregadero, por ejemplo. Ahora bien, lo primero siempre es estar protegidos, por lo que cuando se trabaje con el bicarbonato de sodio frote con una esponja no abrasiva para limpiar los azulejos de la cocina y luego enjuagar con mucha agua para eliminar los restos, se hará siempre con guantes.
Utilizar amoniaco para limpiar azulejos
El amoniaco es un potente limpiador y desinfectante para azulejos de cocina, si bien, dado su poder corrosivo el uso de los guantes es obligatorio. Antes de comenzar el proceso de limpieza se recomienda abrir puertas y ventanas de la cocina para ventilar bien la estancia. Se han de diluir máximo dos cucharadas de amoniaco en un cubo de agua antes de aplicar el producto sobre las baldosas.
El vapor de agua
Puedes utilizar las máquinas de vapor, que tienen a su favor el uso del agua a presión caliente. Se trata de un método rápido, sencillo y a la vez más económico y menos abrasivo. Con el vapor, la grasa de los azulejos se diluye y es más fácil eliminarla después con un trapo limpio y seco.
Consigue unos azulejos como el primer día con productos desengrasantes
Además de los trucos caseros para limpiar azulejos de la cocina, en el mercado existen productos desengrasantes específicos para dejar las baldosas de la pared como nuevas. La mayoría de estos se presentan en formato spray, por lo que su aplicación es muy cómoda, aunque dada su composición también abrasiva leer bien las instrucciones antes de su aplicación.
Una vez se aplica el producto sobre los azulejos, se debe frotar levemente con una esponja o paño. Revisa las instrucciones del fabricante, por si hubiera que dejar reposar el producto para que sea más efectivo en la limpieza de los azulejos. Finalmente, se retira con un paño y adiós a la grasa y la cal que se acumula del vapor de agua.
El limpiacristales
Aunque se utilice el término limpiacristales, es igualmente válido para puertas lacadas y también para limpiar los azulejos de la cocina. Eso sí, en el caso de los últimos, siempre hay que proceder a eliminar la grasa previamente, ya que la composición de los limpiacristales no poseen propiedades desengrasantes. Se utilizará o bien en formato espray o aplicado sobre un paño o esponja limpios después de haber retirado cualquier resto de limpiador de azulejos. Con una sencilla pasada recuperarán el brillo original sin tener que frotar.
Cómo limpiar las juntas de los azulejos
Si el uso diario, los vapores y la grasa ensucian los azulejos, más aún las juntas. Estas leves oquedades son el espacio ideal para que se acumule esa grasa no vista, más seca e incrustada, y por lo tanto va a costar más eliminarla. Si no se limpian con regularidad pasaremos del blanco al gris y de este al negro en menos tiempo del que pensabas, lastrando la apariencia de los azulejos y dejando una sensación de suciedad permanente nada agradable.
¿Cómo limpiar fácilmente las juntas de los azulejos?
Si en la colocación se han usado juntas adecuadas de alta composición de resinas tipo Dekogrout de Benfer que tiene muy poca porosidad, la suciedad también será superficial y con el mismo sistema de limpieza que hemos mencionado para mantener los azulejos como nuevos, las juntas quedarán impolutas y mantendrán su color original. También puedes utilizar productos específicos para las juntas de azulejos, para ello se aplica el producto directamente sobre el cepillo o la junta y se frota hasta que recupere el color natural.
Sino fuera así y en su día se hubiera usado juntas de baja calidad y con una alta porosidad, la única solución es utilizar una herramienta para rascar las juntas existentes y realizar una nueva aplicación de junta de baja absorción y con una composición alta de resina, como hemos mencionado anteriormente en este post.